Chupa la guagua

Llevamos como dos años de día de la marmota y pese a que toda esta cagada debiera recordarnos a todes que no hay futuro ni esperanza si no cortamos algunas cabezas y algunos penes, resulta que las perlas se pusieron a traer pendejos a este mundo y a este país tan justo para toda mujer embarazada.
No es por ser mala, pero acaso son weonas? ¿cuál es el gusto de ponerle nombre al polvo en un momento de la historia en que por fin podemos acercarnos un poco al sueño de reivindicar la dignidad que nos fue arrebatada desde que éramos gameto?. Como si no fuera suficiente soportar a un genocida en la Moneda, a un weas en la cama y a un jefe encima de una, ahora hay que someterse a la maternidad.
Y yo soy solidaria, la amiga que siempre es como la con-ciencia de las demás: la que siempre tiene un oído para los dramas que trataste de que evitaran, la que llega a la casa con una casata de helado y ve películas insoportablemente huecas de cuicas gringas comiendo helado mientras lloran, la que las acompaña a hacerse test para ver si el violador de turno les dejó algún regalito esparcido en el cuerpo, la que siempre tiene algo que decir pero nunca escuchan.
Y como me importa un container de ovarios si me van a ha-cer caso o no, me meto igual, total no tengo un aborto no efectuado que me distraiga de mis objetivos, así que aunque haya poco tiempo o dinero, dispongo de todo para tratar de concientizar a mis amigues.
Hay que tener tacto si, nunca tan weona. Yo se que empu-jarlas por una escalera puede ser efectivo pero hay que tratar de evitar cualquier tipo de violencia, po pensándolo bien, focalizar esa violencia en el futuro retoño que se está alimentando de tu cuerpo como un parásito. Empieza visitándolas: llega a la casa con una matita de apio, su receta trucha de misotrol por si las dudas y trata de desviar la conversación a cosas simpáticas, como por ejemplo el sin fin de cosas que puedes hacer estando soltera y sin hijos… si de repente te quedas sin ideas las puedes sacar de esos comerciales de toallas higiénicas.
Si eso no funciona continúa mandando mensajes subliminales, sus videos de youtube -como para irlas acostumbrando- y sugerirle algún documental de niños deformes (eso funciona con las que alguna vez fueron a colegio católico).
Sin embargo hay algunas que son bien weonas y hay que hacerle lavativas mentales para que sacudan toda esa culpa cristiana. Esa cultura de mierda que les hace creer en la magia de la concepción, la familia, el jipi al palo buena onda que se la pasaba weviando con un entourage de vagos sin mencionar a las decenas de mujeres que seguramente les hacían todo para que los bastardos se dedicaran a hacer puerta a puerta, tal como pasa con los constituyentes.Y lo peor es la virgen maría, la maldita virgen maría… A ver, no tengo nada con quien debe haber sido la verdadera María, sino a esa ilusión zoofílica de la iglesia donde es mejor pensar que se culió una paloma y no que el viejo pedófilo de José era impotente y que la María, como mujer inteligente que era, se vio obligada a satisfacer sus deseos con algún otro palestino rico. El problema, amiga María, es que el gil no encontró nada mejor que dejarte sola a cargo de la bendición, y como el otro viejo gorriado era incapaz aparte de impotente, tuvo que hacerse el weon. La María que me gusta es la de verdad, es esa pendeja caliente que pese a que la obligaron a casarse con un Osama Bin Laden sin lucas, le importó una uretra y se tiró a un weon X, se cagó al viejo pedófilo y se aprovechó de la superstición Patriarcal de ese entonces -básicamente igual la que tiene Arabia Saudita- y les contó la wea de la paloma, el papito dios, el hijito bonito cochita más rica, etc… así que todos los fariseos tuvieron que meterse las piedras en la raja, al menos por ahora.
Justamente porque mi argumento es tan irrefutable e histó-ricamente certero, es que una pobre mujer con el cerebro lavado no se ve tan convencida… así que como último recurso tienes que usar esa misma superstición que le hace creer en los milagros y transformarla en alguna maldición, magia negra, mal de ojo o lo que se te ocurra, para que piense que el niñito le va a salir malvado, a ver si en una de esas piensa racionalmente y aportar un granito de arena en el combate, si es por un mundo sin patriarcado, por un mundo con menos contaminación. — CLAUDIA ALCALDE ■